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Posiblemente a muchos de vosotros os suene la herramienta "Tampón de Clonar". Su funcionamiento es realmente sencillo. Si queremos arreglar un área imperfecta o esconder un defecto, lo más normal es utilizar una porción similar de la misma imagen como "parche" con el que cubrir esas partes indeseadas. Así, con esta herramienta seleccionada, pulsamos la tecla OPCIÓN (Alt) mientras hacemos clic en la zona "donante" para "mojar" con ella el tampón; acto seguido hacemos un clic sobre el error que queremos subsanar y veremos cómo éste queda cubierto por la porción de la imagen que seleccionamos en el primer paso. Si vamos repitiendo este proceso con sumo cuidado y paciencia, finalmente podremos reparar amplias zonas de desperfectos.

Si nunca lo habías hecho, verás que no es tan sencillo como parece; la función del tampón es, como su propio nombre indica, clonar partes de la imagen, es decir, colocar copias idénticas de un sitio en otro. Como es fácil de deducir –y experimentar– el principal problema con el que nos topamos es la diferente luminancia y cromancia de los fragmentos donante y receptor. Cuando queremos copiar un pedazo de imagen en otra zona, normalmente sólo nos interesa la textura de la porción donante y tratamos de conservar el color y la luminosidad del área receptora. El Tampón de Clonar es incapaz de hacer este trabajo, por lo que los usuarios de versiones 6 y anteriores aprendimos mil y una técnicas (a cual más compleja y estrafalaria) para solventar esta carencia.

Ahora, con la versión 7, Photoshop estrena tampón nuevo, tan potente y sorprendente que ha merecido ser bautizado con el nombre de "Pincel Corrector". Su uso es similar al del Tampón de Clonar: seleccionamos el área donante, pulsamos la tecla OPCIÓN al hacer clic en ella y luego hacemos clic en el área receptora. Como por arte de magia, en cuanto soltamos el botón del ratón, Photoshop ajusta la luminancia y cromancia del donante a los valores del receptor, con lo que, al fin, tenemos el "injerto" soñado; sólo un especialista sería capaz de, con mucho esfuerzo, descubrir la "trampa". Con el Pincel Corrector podemos hacer operaciones tan sorprendentes como escoger áreas donantes en sombras para corregir errores en zonas de luces, y viceversa.

Pero eso no es todo. Si el área a corregir es realmente grande, puedes optar por el hermano mayor del Pincel Corrector, la herramienta "Parche". El principio utilizado para subsanar errores y desperfectos es idéntico al del Pincel Corrector; tan sólo varía su forma de utilización. En este caso seleccionamos el área que queremos corregir, realizamos las modificaciones que queramos a la selección (como por ejemplo, aumentar el área de calado) y finalmente la arrastramos hacia la porción que hará de donante; de forma cuasi milagrosa, todo rastro de imperfección desaparecerá de sopetón.

Como explicar con palabras el funcionamiento va a ser harto complejo y posiblemente un esfuerzo fútil, te invito a la galería de imágenes para ver tanta maravilla puesta en práctica. Haz clic en la primera de las fotografías de la derecha del artículo para seguir paso a paso el proceso de "embellecimiento" del rostro de un sujeto cualquiera.

No obstante, antes de empezar, debes tener en cuenta una serie de advertencias:

a) El Pincel Corrector no es el Tampón de Clonar, así que debes olvidar ciertas manías adquiridas, como la de ir "mojando" el tampón en diferentes zonas cada vez que corriges un fragmento.

b) No utilice pinceles difuminados con el Pincel Corrector puesto que ya hace una transción por defecto con el fragmento de destino. Usa pinceles duros (100% de dureza).

c) Es mejor "reparar" las zonas dando pinceladas cortas que arrastrando el cursor por todo el área afectada.

d) Para grandes "reparaciones" utiliza la variante del Pincel Corrector, la herramienta Parche.

e) El Pincel Corrector no sustituye la herramienta Tampón, simplemente la complementa; el Tampón sigue siendo útil en situaciones en las que debes restaurar áreas sin detalle (por ejemplo, zonas de la imagen que han desaparecido y que se pueden rellenar con textura).

f) El Pincel Corrector necesita trabajar en capas que contengan información: no funciona la técnica usada hasta ahora de utilizar una capa vacía para las correcciones del Tampón.

g) Por último, recuerda que el Pincel Corrector difumina los bordes de fusión. En ocasiones esta útil característica te impedirá realizar correcciones finas; en su lugar deberás utilizar nuevamente el Tampón de Clonar.

Y eso es todo. Ahora, practica y practica hasta dominar esta nueva y potente herramienta.